Tan ilimitados como inalcanzables, tan absurdos como paradójicos, así son los sueños.
En nuestros sueños todo es posible, pero también hay sueños que se convierten en pesadilla y esta dualidad de nuestra imaginación en periodos de un aparente “sin control” nos hace dudar acerca de si queremos que los sueños se hagan realidad.
miércoles, 8 de octubre de 2008
Sueños
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
Los 5 más leidos de la semana
-
Y cuando pienso que de ti ya lo pensé todo, llega un nuevo pensamiento. Una idea Inédita que fluye como río en el teclado y que hace que...
-
Somos distintos, pero no opuestos Somos diferentes, pero afines Somos incompatibles pero no somos agua y aceite Somos rio y puente ...
-
- ¿Maestro, como sabré cuando llegue el amor? - No lo sabrás, ni siquiera te enterarás, pues el amor es muy sutil, no hace aspavientos. - … ...
-
Quiero que me oigas, sin juzgarme. Quiero que opines, sin aconsejarme. Quiero que confíes en mi, sin exigirme. Quiero que me ayudes, sin in...
-
Gracias a los que asistieron el día sábado pasado a la presentación del libro en el Parque Cultural Reynosa . Para quienes no pudieron ha...
1 comentario:
Los sueños pueden se mágicos y llenarnos de alegrías. Las pesadillas son nuestros fantasmas no resueltos, pero como dices ¿como desear los unos sin que se atraviesen los otros?.
Buena paradoja.
Aquí buscando un pretexto para saludarte
Buen Día
Celia
Publicar un comentario